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viernes, 17 de febrero de 2012

Capítulo Once



-Teo: A la tercera va la vencida —dijo en el parque, días más tarde— Es imposible que Lanzani tropiece aquí con nosotros.

Se encontraban en un lugar retirado a la orilla del lago, sentados muy juntos sobre una manta, y aunque la tarde estaba bastante fría, una cálida ola invadió el corazón de Lali ante el interés que Teo demostraba por ella.

No estaba habituada a ese tipo de atenciones. Incluso había continuado llamándola tras la desastrosa velada en el Claire’s que había terminado muy pronto porque el médico tuvo que marcharse tras una llamada urgente del hospital.

De hecho, la había llamado todos los días. En esas conversaciones solía preguntarle por su trabajo, y de paso, también hablaba de sí mismo. Todo era tan romántico que Lali realmente quiso creer que él podría ser el hombre que representaba su futuro. Tal vez sería posible, si Peter dejaba de sabotear los intentos de Teo para intimar con ella.

Pero esa vez no podría encontrarlos. Aquélla iba a ser su noche. El champán parecía darle tanto valor que decidió que más tarde llevaría a Teo a su casa y a su cama.
-Lali: Siento mucho lo de Peter. Ni siquiera puedo darte una explicación lógica de su conducta.
Teo alcanzó la botella de champán y volvió a llenarle el vaso.
-Teo: No cabe duda de que está celoso.
Lali apenas pudo ocultar un bufido bastante poco delicado.
-Lali: ¿Peter? Oh, no. Más bien creo que se trata del complejo del gran hermano o algo así.
-Teo: ¿Gran hermano?

Entonces le habló de la muerte de sus padres, le contó que los Lanzani se habían hecho cargo de ella y cómo Peter había asumido el papel de Nico cuando el hermano tuvo que alistarse en el Cuerpo de Marines.
-Teo: Qué duró debe de haber sido para ti —comentó al tiempo que le pasaba un brazo sobre los hombros. Lali sintió que unas lágrimas intempestivas le quemaban los párpados. Horrorizada por su inesperada emotividad, pestañeó con fuerza para retenerlas.
-Lali: Me siento muy bien así. Todo está bien —murmuró al sentir que el brazo la ceñía un poco más.
-Teo: Y muy íntimo —murmuró en tono sugerente.

Sí, una merienda en el parque, íntima y romántica. A pesar del frío reinante decidió que le encantaba, lo mismo que la sonrisa del doctor y las cosas exquisitas que había llevado en una cesta para celebrar el día de San Valentín. Aparte del champán, había galletas, caviar, queso francés y uvas.

Todo era perfecto. El champán le quitaba el frío y la relajaba tanto como los cumplidos de Teo.
-Teo: ¿Puedo besarte, Lali?

Ella se volvió a mirarlo con una sonrisa invitante y esperó que el corazón latiera alocadamente en su pecho mientras él se inclinaba sobre su rostro.

Y esperó... y esperó... y esperó mientras él presionaba su boca con un gemido y su lengua la animaba a abrir los labios para él. «De acuerdo..., es agradable», pensó en tanto intentaba concentrarse en el beso con el mismo entusiasmo que demostraba el doctor. Sí, no era malo. Pero... ¿dónde estaban los fuegos artificiales que debían estallar detrás de sus párpados cerrados? «Tal vez he perdido la práctica». Decidida a entregarse a ese instante, alzó una mano para acariciarle el pelo mientras él la ceñía contra su cuerpo.

Dulce intentó relajarse cuando él la tendió sobre la manta y la besó con más ardor. Aunque la caricia le pareció interminable y no realmente agradable. La verdad fue que se sintió... estafada.
-Teo: Llévame a tu casa —murmuró con pequeños besos en el mentón de la joven.
Los besos la hicieron estremecerse, pero no de pasión. ¿Qué le pasaba? Verdaderamente había deseado ese momento y sin embargo, cuando la mano del médico avanzó hacia sus pechos, le aferró la muñeca y se sentó bruscamente.
-Lali: Teo... yo...

Estaba tan avergonzada. Lentamente alzó la vista y creyó ver en los ojos de Teo un ramalazo de rabia que le asustó.
Pero de inmediato él esgrimió una sonrisa. La rabia se esfumó en un segundo y Lali pensó que habían sido imaginaciones suyas.
-Teo: Voy demasiado rápido, ¿no es así? —preguntó con suavidad.
-Lali: No —insistió ella refugiándose en sus brazos— Sólo que... yo no tengo experiencia —admitió, y de pronto supo que su incapacidad para responderle se debía a los nervios— Y quiero que tú me ayudes.

Los ojos del doctor volvieron a incendiarse y se inclinó para besarla... justo cuando un perro se acercó corriendo hacia ellos y con un ladrido se abalanzó sobre el pecho de Teo.
-Teo: Qué demonios... —apenas alcanzó a farfullar cuando el peludo y apestoso animal lo tiró de espaldas y lo mantuvo quieto con los caninos peligrosamente cerca de la yugular.

Con un grito, Lali se puso de pie de un salto con tan mala suerte que la botella de champán se derramó sobre los pantalones de Teo.

Tras un lengüetazo, el animal perdió interés en la garganta del doctor y, montado a horcajadas sobre él, el monstruo lanudo se puso a lamer la manta empapada de champán y luego a birlar el queso y las galletas desparramadas mientras ensuciaba la pernera de los pantalones con las uvas y el caviar que había machacado con las patas traseras.
-Lali: ¡Oh Dios! —se lamentó, y de pronto reconoció al perro— ¡Oh, Dios! —repitió al tiempo que la conmoción inicial daba paso a una furia ciega mientras volvía la cabeza para descubrir al dueño que con toda seguridad no andaba demasiado lejos. En ese momento, Peter Lanzani apareció entre los árboles a trote lento y con una creciente expresión contrita— ¡No puedo creerlo! —exclamó Lali mientras él se acercaba con una correa en una mano y un collar de perro en la otra. Peter se detuvo casi sin aliento y le dirigió una mirada compungida.
-Peter: Y yo tampoco. Íbamos paseando cuando este estúpido animal tiró de la correa con tanta fuerza que hasta arrancó el collar y luego se escapó.

¡Qué coincidencia! Como si ella no supiera que el único ejercicio que Shamu hacía era enterrar el hocico en el cuenco de la comida.

-Lali: ¡Quiero que ahora mismo le quites esa bestia de encima! —ordenó, colérica. Pero Peter ya se acercaba al perro y con mimos y tirones lo sacaba del cuerpo de Teo. Lali estaba tan conmocionada que apenas escuchó las palabras de disculpa de Peter.
-Peter: Estás todo mojado. Si no queres agarrar un resfriado será mejor que vayas a casa y te cambies esos pantalones— le aconsejó al doctor.

Con una venenosa mirada, Teo intentó ponerse en pie. Luego se volvió a Lali con la rabia pintada en la cara. Tras recoger la manta y la cesta se alejó pisando fuerte en dirección a su coche. Pasaron largos y humillantes minutos. Lali apenas se daba cuenta de que el perro seguía hurgando entre las últimas galletas y trocitos de queso mientras Peter intentaba ponerle el collar.
-Peter: ¿Estás bien? —preguntó al fin. Ella siguió con la mirada el coche de Teo hasta que lo perdió de vista y luego, lentamente, volvió la atención al hombre que le había saboteado el romance y a su cómplice de cuatro patas.
-Lali: ¿Tengo aspecto de estar bien?

Continuará…

10 comentarios:

  1. mas noveeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee

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  2. Bue Teo un abusador mal! jaja Peter lo amo! quiero chape Laliter! jiji Besos!

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  3. nooooo quedo demasiado buenooo
    y peter a lo que recurre usar al perro que con suerte sale jajajajajajja
    pobree lali yo en su lugar estaria enojadisima y ni le hablaria a peter llegaria y me iriaa jajajajaj

    faltan muchos caps para que pase algo entre lali y peter??

    subiii otroo

    @lali_peterlove
    /gonzalez_andy92

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  4. jajajajaajajajajajaja!!! es buenisimaaa!! que malo Peter! jajajajaja!! quiero masss por faa!! besos

    faty****

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  5. que bueno Peter... que gracia, si no te pasa a ti, claro que siendo Peter yo me dejo... muy buena la nove

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  6. Ya quiero laliteeeeer!
    Dios, no aguanto mas.
    Un beso grandee.

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  7. hay lo unico que puedo decir es uqe no se encuentra bien por que no le emociuona nad teo y no l ouqeria unque dija que si entonces la salvo

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  8. ps: me voy todo el fin de vacaiones no se si pueda firmar peor cuando regreso :P

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  9. BUENISIMO!!!! y aunque bastante Looser Benjamin al comienzo preguntandole si la podia besar despues medio sarpado queriendo que la lleve a su casa pero OBVIO llego el "salvador" jajjaaj con su super idea y le lanzo al perro!!! ES UN GENIO!!! :D

    MAS NOVE!!!!

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