Apretujada entre sus dos sirvientes Mariana Espósito,
Lali como le decían todos, conducía el carruaje mientras intentaba
ignorar su creciente incomodidad.
Cansada y agarrotada, ansiaba con todas sus
fuerzas un baño caliente y una cama blanda. «Pero, en lugar de eso, tengo que
conformarme con un camino lleno de baches y un asiento duro como una piedra.»
Intentó mover los hombros, pero permanecieron firmemente
apretados entre Winston y Grimsley. Dejó escapar un suspiro de resignación. Iban
a llegar a casa con horas de retraso. Todo el mundo debía de estar
terriblemente preocupado por ellos. Y, si Winston y Grimsley no dejaban de
discutir, tendría que estrangularlos con sus propias manos.
Una ráfaga blanca en la oscuridad captó la atención de Lali,
alejando sus pensamientos del asesinato y la violencia. Entornó los ojos para
aguzar la vista y miró hacia delante, pero no vio nada.
Exceptuando una enorme sombra que acechaba cerca de una
arboleda.
El miedo le secó completamente la boca. Tiró de las
riendas de Sansón, deteniendo en seco la calesa con un fuerte chirrido. Luego
señaló con un dedo tembloroso hacia los árboles y susurró:
—Lali: ¿Qué es eso?
Grimsley entornó los ojos y miró hacia la oscuridad.
—Grimsley: ¿Qué? Yo no veo nada, señorita Lali.
—Winston: Eso es porque llevas las malditas gafas encima
de la calva, en vez de en tu larga nariz —masculló en tono despectivo—.
Póntelas donde deben estar y verás bien, viejo estúpido y mezquino.
—Grimsley: ¿A quién has llamado viejo estúpido?
—Winston: A ti. Y te he llamado viejo estúpido y
mezquino. Por lo visto, aparte de viejo estúpido y mezquino, eres sordo.
—Grimsley: Bueno, es difícil oír nada sobre el fondo
cacofónico de esa rueda que se supone que has reparado —contestó levantando arrogantemente
la nariz.
—Winston: Por lo menos yo la he reparado. —le devolvió el
golpe—. Y he hecho un trabajo condenadamente bueno. ¿Verdad, zeñorita Lali?
Lali se mordió la cara interna de una mejilla. Durante
los tres años que el ex primer oficial de cubierta de su padre llevaba viviendo
con los Espósito, Lali había intentado mejorar la forma de hablar del ex
marinero, aunque no siempre con éxito.
—Lali: Ha hecho un buen trabajo reparando la rueda,
Winston, pero ahora mire hacia aquellos árboles. —Volvió a señalar en la
dirección de la sombra que se movía junto a la arboleda. Un escalofrío de pavor
le recorrió la columna vertebral—. ¿Quién anda ahí? ¡Dios mío, ruego a Dios que
no se trate de una banda de ladrones!
Lali palpó disimuladamente la falda para asegurarse de
que llevaba el bolsito bien sujeto y oculto entre los pliegues del tejido.
«¡Santo Dios! Cuando pienso en los riesgos que he corrido, las mentiras que he
tenido que decir para conseguir este dinero... No pienso entregárselo a ningún
salteador.»
La invadió un profundo sentimiento de culpabilidad.
Nadie, incluyendo a Grimsley y a Winston, tenía la menor idea del motivo de
aquel viaje a Londres, y a ella le interesaba que las cosas siguieran así.
Odiaba tener que mentir y sabía que los secretos llevaban a la falsedad, pero
su familia necesitaba el dinero y ella era la única responsable de su
seguridad.
Luchando contra el miedo, que iba en aumento, Lali miró
alrededor. Nada parecía fuera de lo corriente. Inspiró profundamente para
calmarse, y casi se ahoga. La enorme sombra se separó de la arboleda y se les
acercó.
Lali se quedó helada. Su mente le decía: «no te dejes
llevar por el pánico», pero su cuerpo se negaba a obedecer. «¿Dios, qué será de
mi familia si muero en este camino oscuro y solitario? Tía Julia a duras penas
puede cuidar de sí misma, y mucho menos de mis cuatro hermanos pequeños. ¡Aleli
sólo tiene seis años! Y Mateo y León también me necesitan, al igual que Cande.»
La sombra se acercó más y el cuerpo entero de Lali
respiró aliviado. «Un caballo —se dijo—. No es más que un caballo.»
Winston le puso una mano en el hombro.
—Winston: No se preocupe, zeñorita Lali. No permitiré que
le haga daño. Le prometí a su padre, que en paz descanse, que la protegería de
todo mal y lo haré —añadió sacando pecho—. Si hay algún bandido ahí fuera, le
romperé el escuálido cuello, le sacaré las tripas con mis propias manos y lo
ataré con sus propias vísceras. Le...
Lali interrumpió la macabra diatriba de Winston con una
tos seca.
—Lali: Gracias, Winston, pero no creo que haga falta. De
hecho, parece ser que nuestro «bandido» no es más que un caballo sin jinete.
Casi mareada por el alivio, Lali ahogó una risita y
decidió ignorar el lenguaje de Winston. Antes de que ninguno de los dos
sirvientes pudiera ayudarla, saltó del asiento de la calesa y se acercó
cautelosamente al animal. Era inmenso, pero ella todavía no se había encontrado
con ningún caballo que no pudiera seducir.
Cuando llegó a su lado, cogió las riendas que colgaban
sobre la silla.
—Lali: ¡Qué bonito eres! —dijo con dulzura, alargando el
brazo para acariciar la aterciopelada nariz del semental—. Eres el caballo más
bonito que he visto nunca, y mira que he visto y acariciado caballos en mi
vida. ¿Qué haces aquí tan solo? ¿Quién es tu dueño?
El animal restregó el hocico contra la palma de la mano
de Lali y relinchó. Lali llamó a los sirvientes sin levantar la voz:
—Lali: Grimsley, traiga la lámpara, por favor. Y,
Winston, sostenga las riendas mientras exploro al animal.
—Lali: Miren aquí —dijo poco después mientras se
agachaba—. Tiene sangre en la pata delantera. —Le palpó la herida con
delicadeza. El caballo levantó y bajó bruscamente la cabeza e intentó alejarse,
pero Winston lo retuvo.
—Grimsley: ¿Es grave? —preguntó, atisbando por encima del
hombro de Lali.
—Lali: No, gracias a Dios. Necesita tratamiento, pero no
tiene la pata rota. —Se puso en pie y le cogió la lamparita a Grimsley. El
caballo tenía varios rasguños en el flanco derecho y la cola llena de hojas y
ramitas.
—Lali: Parece como si hubiera corrido atropelladamente
por el bosque —dijo pensativa—. Es un hermoso ejemplar y es evidente que está
bien cuidado. Los rasguños son recientes y está ensillado, pero no hay ninguna
casa en bastantes kilómetros a la redonda. Ha debido de tirar al jinete. —Se
volvió hacia la espesura. Mirando en dirección a la oscuridad, se apretó una
mano contra el nudo que se le estaba haciendo en la boca del estómago e hizo de
tripas corazón para luchar contra el miedo—. Deberíamos buscar al jinete.
Podría estar malherido.
Grimsley abrió los ojos de par en par y tragó saliva con
dificultad.
—Grimsley: ¿Buscarlo? ¿Aquí? ¿Ahora?
—Winston: No, viejo estúpido y enmohecido —contestó con un
bufido—. La semana que viene.
—Grimsley: Pero, está muy oscuro, señorita Lali, y ya
vamos con horas de retraso por la reparación de la dichosa rueda. Todo el mundo
estará preocupado...
—Lali: De modo que no viene de un cuarto de hora —le
interrumpió. Sabe Dios que no había nada que deseara más que llegar a casa,
pero... ¿cómo iba a irse sabiendo que alguien podía necesitar ayuda?
Firmemente decidida, dijo:
—Lali: No podemos irnos sin comprobarlo.
—Grimsley: Pero... ¿y si el caballo pertenece a un
asesino o a un ladrón? —preguntó con voz débil y trémula.
Lali dio una palmadita en la mano al anciano.
—Lali: Lo dudo, Grimsley. Los asesinos y los ladrones no
suelen tener caballos tan magníficos, y... ¿a quién esperarían matar o asaltar
en un camino tan poco frecuentado?
Grimsley carraspeó.
—Grimsley: ¿A nosotros?
—Lali: Bueno, si está herido, no creo que pueda hacernos
mucho daño y, si no lo está, nos limitaremos a devolverle su caballo y
proseguiremos tranquilamente nuestro camino. —Lali dirigió una mirada seria y
penetrante a sus compañeros de viaje—. Además, después de lo que les pasó a mi
madre y a mi padre, los dos saben mejor que nadie que nunca me perdonaría a mí
misma abandonar a alguien que está sufriendo.
Winston y Grimsley guardaron silencio y asintieron.
Volviendo a centrar su atención en el semental, Lali acarició el sudoroso
cuello del animal.
—Lali: ¿Está cerca tu dueño? —le preguntó con ternura—.
¿Está herido?
El caballo piafó y relinchó. Lali miró a Winston y a
Grimsley y añadió:
—Lali: Los caballos tienen un gran sentido de la
orientación. Veamos si nos guía hasta algún lugar.
Antes de que ninguno de los dos hombres pudiera
detenerla, Lali se levantó la falda, introdujo un pie en el estribo y se dio
impulso para subirse a la silla de montar. Fue una suerte subirse al caballo en
el primer intento porque el caballo era el más grande que había montado nunca y
Lali no poseía una gran estatura.
—Lali: Por favor, vaya a buscar el botiquín a la calesa,
Winston. Tenemos que estar preparados. Grimsley, usted encárguese de la
lamparita.
Con la naturalidad de un jinete consumado, Lali apretó
ligeramente los talones contra los flancos del animal. El caballo parecía saber
muy bien adonde se dirigía y avanzó decidido. Se desplazaron paralelamente al
camino durante aproximadamente un kilómetro y medio, luego giraron y se
adentraron más en la oscuridad del bosque. Aflojando las riendas, Lali
inspeccionó atentamente el área con la mirada mientras Winston y Grimsley la
seguían sin dejar de discutir.
—Winston: ¡Que me arrojen a la cubierta de la toldilla y
me dejen en paños menores! —Rezongó—. Acelera el ritmo, viejo saco de huesos.
No pienso pararme para darte un empujón en tu lento y cansado trasero. Te
dejaré aquí hasta que te pudras.
—Grimsley: Puedo seguir el ritmo perfectamente —resopló—.
Lo que pasa es que llevo zapatos nuevos.
—Winston: No quieres rayarte tus preciosos zapatitos,
¿verdad?—dijo en tono despectivo. Dios me libre de los mayordomos viejos y
remilgados. Son peores que las nenas.
—Grimsley: Yo era el ayuda de cámara del capitán Espósito.
—Winston: Ya, ya. Y yo era la mano derecha del capitán,
descanse en paz. Dime qué es más importante.
—Grimsley: Un ayuda de cámara, por descontado. —Inspiró
por la nariz sonoramente—. Y, por lo menos, yo no huelo a perro muerto.
A Winston se le escapó una risita.
—Winston: Ahora sí, viejo Grimmy. ¡Hay que vigilar dónde
se pisa cuando uno va siguiendo a un caballo!
Las voces de los sirvientes seguían y seguían, como un
disco rayado, pero Lali las ignoró y se concentró en los alrededores. El bosque
estaba más negro que la boca del lobo. Desde luego, tenía que haberse vuelto
loca para embarcarse en semejante aventura. Pero ¿qué otra opción tenía? Cerró
los ojos y se imaginó a Mateo o a León, heridos y solos. Sabe Dios lo mucho que
a ella le gustaría que en una situación similar alguien echara una mano a sus
hermanos. No se podía marchar sabiendo que alguien podía necesitar ayuda,
aunque ello supusiera estar a punto de morirse de miedo.
Al cabo de unos minutos, el caballo se detuvo.
Relinchando suavemente, pisoteó la tierra y bajó las orejas. Lali desmontó, le
cogió la lamparita a Grimsley y la levantó, iluminando los alrededores con un
brillo suave y dorado. Estaban ante una especie de precipicio. Se aproximó
hasta el extremo y miró hacia abajo, deslizando la mirada a lo largo de una
empinada pendiente rocosa. Más abajo se oía el suave murmullo de un riachuelo.
Grimsley atisbo por encima del hombro de Lali y restregó
repetidamente su zapato contra la hierba.
—Grimsley: ¿Ve algo, señorita Lali?
—Lali: No. Hay una pendiente pronunciada y abajo se oye
un riachuelo... —Su voz se fue desvaneciendo poco a poco cuando llegó a sus
oídos un grave quejido procedente de más abajo.
—Grimsley: ¿Qué... qué es eso? —susurró con voz trémula.
—Winston: Sólo es el viento, viejo bobo y malhumorado
—contestó en tono cortante.
Lali se apretó el estómago con la mano y negó con la
cabeza.
—Lali: No, escuchen.
Otro quejido, casi inaudible pero inconfundible, se elevó
desde la oscuridad que se extendía ante ellos.
—Lali: Hay alguien ahí abajo —dijo en tono de mal
presagio. Sin pensar ni un momento en sí misma, empezó a bajar por la empinada
pendiente. A medio camino, levantó la lamparita, proyectando un haz de luz
hacia el riachuelo.
Y entonces lo vio.
Continuará...
______________________________________
HOLAAAAA!!!
perdón por desaparecer... 3 DÍAS!!!... wow parecían más! las extrañe un MONTÓN!!!...
algunas me deben querer matar! apenas comenzaba la nove y me fui! PERO lo q pasó es q me fallaron los patrocinadores! >:S sisisisisi mis papás se olvidaron pagar! pueden creerlo!! osea q pasaría si yo me olvidara ir a clases una semanita??? ASÍ NO!!!... y todo lo q me perdí! X DIOS!!! Lali ya tiene 500.000 seguidores e hizo twittcam, Peter ya tiene 400.000 y sorteo la remera de los pumas! xq no pasa todo eso cuando yo estoy!! LPM!!!!
fufffffff!! ya hice mi descargo!... ya me siento mejor!... MUCHAS gracias por desearme suerte en el examen!! me fue mui bien! va! creo no sé todavía pero debo decir q estudié consientemente :D igual terminé demasiado rápido no sé si es una señal buena o mala ¬¬'
Juli♥ (LovexLaliyPeter), vagomi, CHARI: De nada! me encanta q les gusten las noves!... Y noves escritas por hombres???... solo puedo recomendarte estos... xq no leí más!... jeje... “Contra el viento del norte” y "Cada siete olas" de Daniel Glattauer (q figura en mi lista de libros favoritos) "Perdona si te llamo amor" y "Perdona pero quiero casarme contigo" de Federico Moccia, y la q estoy a punto de leer "El primer día" de Marc Levy!!!... y Chari puedo decirte con toda seguridad que estos escritores SUPERAN en sensibilidad a muchas escritoras q hasta ahora no han podido sacarme NINGUNA lágrima!! :D
@Chikis_Tv voy a trabajar en tu sugerencia!!! ;D
Hippy Poetisa Revolucionaria, @JoslieLove... TAN obvio es q el asesino es Benja??? jajaja igual esperemos a leer!... recuerden mandalayas NADA ES LO Q PARECE!! ;)
ca_amorlaliter DULLLLLL!!! no sabés lo q te extrañe loca!!!... pensé q no volvías más!! pero bueno... por lo menos pasaste tiempo de calidad con tu papá!! :)
abril jajajaja tenés razón!! apenas el 1º cap y ya lo quieren matar a Peter!!
CHARI: JAJA LA PLAYA!!! y si! hay q aprobechar! vacaciones después de dos años!... VOS SOS LO MÁS SIRENA!!!
Aya! escribí mucho no?? mi comentario es más largo q el cap!!! jiji
si quieren el siguiente cap HOY
+25 FIRMITAS ^-^
si por favor más nove!!!
ResponderEliminarno nos dejes así!
soy una fan eterna de tus noves
por favor gente, firmén!
ResponderEliminarnecesito leer el proximo capitulo hoy
más nove más nove
mas
ResponderEliminarHay! DIOS! se quedo buenisimooo el cap me dejastee megaa Intrigada & picadaa Ya extrañabaa la novee estaa super interesantee :DD!!
ResponderEliminar@maaff_lazaro
MASSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS
ResponderEliminarSí q lo encontró!Me gusta!
ResponderEliminarlo encuentra,lo salva y se enamoran jaja tan soñadora yo espero mas
ResponderEliminarHahahah esta buenísima mas mas mas
ResponderEliminarBásicamente me encantan tus noves nada una GENIA
sube otroo... me gusta :)
ResponderEliminarnecesito mas me encanta
ResponderEliminarooo que lindo lali se sube al caballo asi sin mas para ayudar a alguien y baja sola aunque se pueda caer y le pueda pasar algo para ayudar y bueno ni mas ni menos que ayudar al futuro amor de su vida, massssss
ResponderEliminarps: me encanto el caballo masss
otro otro otro
ResponderEliminarotrooooooo :D
ResponderEliminarxq querian matar a peter?
ResponderEliminarmas
ResponderEliminarquien sera el asesino? quiero mas novela
ResponderEliminartbn me encantan los caballos :D
ResponderEliminarotroo :D
ResponderEliminarOtro ates de qe me duerma :DD creo qe ya todas se durmaeron.. Ajajja bueno SUBE OTRO !
ResponderEliminar1 mas y 25 !!
ResponderEliminarAhora si 25!! :DD sube otro :))
ResponderEliminarEs genial más!!
ResponderEliminarMaaaaas!!!!!
ResponderEliminarMe encantaron esos dos "fieles sirvientes",jajaja,son a todo dar.Lali toda una valiente ,arriesgarse con el miedo k le suponia, k le robasen ,lo k tanto le había costado conseguir para su familia ,k son bastante chiquitos.
ResponderEliminarGracias x la recomendación d libros ,escritos x hombres,y x las anteriores d mujeres.Tomo nota.
ResponderEliminarY si,trabaja d día y d noche,14 o 15 horas diarias y no me gusta exponerlo en la carretera(ya se pasa bastante horas sin poder dormir) .Pero cuando tiene "vacaciones",sigue trabajando x la mañana,así k disponemos d unas horitas para nosotros,al no trabajar d noche.
ResponderEliminarHola! que forma mas romantica de conocerse y que bueno que subiste mas caps. :D Saludos! Atte. Chikis
ResponderEliminarPoniendome al día. Gracias por subir :)
ResponderEliminar