BIENVENID@S - YA PODÉS DESCARGAR EL NUEVO BONUS "El Camino Del Sol" - Twitter @Fics_Laliter - Correo: Ficslaliter123@gmail.com

miércoles, 6 de marzo de 2013

Capítulo VEINTIUNO/DOS



Obviamente no había ninguna razón para esperar cualquier cosa, en lo que ha Peter Lanzani se refiere. Lali se mantuvo recordando a sí misma de este hecho. Quería a Belén. 

Era la primera vez en la vida de Lali que deseaba ser alguien distinto a quien era en realidad. 
— Creo que podría ser mi única oportunidad de ser parte del mundo otra vez. . . 

Tal vez Belén, después de todo, era la más adecuada para ayudar a Peter. Se sentía cómoda con la sociedad de una manera que nunca podría Lali. Muy bien. Si eso era lo mejor para él, no podía encontrar en su corazón nada con que culparlo por ello. El hombre había soportado suficiente dolor y penurias, ella no quería causarle más problemas. 

Salvo que. . . no podía dejar de pensar en él. 

Era como una enfermedad, pero no una que ella pudiera manejar como de costumbre. Estaba constantemente al borde de las lágrimas. Tenía fiebre, fatiga y falta de apetito. De hecho, tenía tan mal humor que Euge había insistido en preparar una olla de acedera para ella. 

—Euge: No eres tú misma – le había dicho — Por lo general eres muy alegre. 
—Lali: ¿Por qué debo estar alegre si no hay razón para ello? – Respondió hoscamente. 
—Euge: ¿Tienes una razón para ser infeliz? 
Lali anhelaba confiar en su hermana, pero guardo silencio. No había nada que Euge pudiera hacer al respecto. Además, de decirle a un centenar de personas, eso no habría hecho que se sintiera mejor. 

Estaba suspirando por un hombre al que nunca podría tener, y no quería que le dijeran lo ridículo que era. Ni siquiera quería dejar de suspirar. La resistencia desesperada de su deseo era su frágil vínculo con Peter. 

Estaba tan obsesionada con él que había considerado ir a Londres para el resto de la temporada. Podría visitar a Cande, y también ver Peter. Sólo que también se vería obligada a verlo con Belén. . . bailes, coqueteos, el cortejo. . . Estaba segura de que no podría soportarlo. No, se quedaría en Hampshire, a donde pertenecía. Cande habría dicho que era una decisión sabia. 

—Cande: Él ha cambiado, La, y no para bien. Cuando Peter regreso de la guerra de Crimea, estuve tentada a decirle la verdad sobre las cartas. Que fuiste tu y no Belén quien las había escrito. Pero ahora me alegro de no haberlo hecho. No me gustaría para fomentar un vínculo entre ustedes. El no es para ti. Bebe más de lo debido. Se sobresalta con facilidad. A veces oye o ve algo que no está allí. Y sé que no duerme, a menudo lo escucho vagando por la casa en la noche. Pero cuando trato de hablar con él, evade mis preguntas como si estuviera haciéndose el tonto. A veces una simple pregunta que nada tiene que ver con la guerra, la evita con rabia que tiene dificultades para controlar. Me pregunto. . . 
—Lali: ¿Qué? – susurro pendiente con preocupación. 
Cande la miro directamente. 
—Cande: Me pregunto si Belén podrá manejarlo. Está tan decidido a tenerla. . . . pero él ya no es el hombre que era. Y Belén no tiene sentido para darse cuenta de ello. Incluso me pregunto si no llegara a ser un peligro para ella. 

Reflexionando sobre las ominosas palabras de Cande, Lali se dirigió a casa de los Lanzani con una misión en mente. Aunque no había nada que pudiera hacer por Peter, había una gran cantidad que podía hacer por Albert. 

Un perro agresivo probablemente podía hacer daño a otros, y estaría privado del amor y la atención necesarios. Los perros son animales sociables por naturaleza, y por lo tanto Albert podría aprender a seguir adelante como otras criaturas. 

El ama de llaves Lanzani, la señora Clocker, la saludó en la puerta y le dijo que Cande no estaba en casa, pero que esperaba su pronto regreso de una visita a la aldea. 
— ¿Quiere esperarla, señorita Espósito? 
—Lali: Lo hare, me gustaría hablar con ella del capitán Lanzani, es un negocio particular — esbozó una sonrisa ante la mirada inquisitiva del ama de llaves — Quiero ofrecerme a cuidar de Albert mientras el capitán Lanzani se encuentra en Londres. 
Los ojos del ama de llaves se abrieron. 
— El tenía planeado abandonar la criatura aquí, y los siervos ha cuidarlo – acercándose a ella susurro — Es el perro de Hades, señorita. El diablo mismo no lo tendría como mascota. 
Lali sonrió con simpatía. 
—Lali: Espero que pueda influir en él para bien. Si el capitán Lanzani lo permite, voy a llevarme a Albert conmigo hoy, y liberarla a usted de la carga de cuidarlo. 

La señora Clocker la miro positivamente 
— Oh, eso es muy amable de su parte, señorita Espósito. Voy a informar de inmediato al capitán Lanzani.— Salió corriendo como si temiera que Lali pudiera arrepentirse. Cuando la forma alta de Peter entró en la habitación, el cuerpo de Lali se cubrió de inmediato con un calor intenso. 
Detente ahí mismo, Lali Espósito, se dijo con severidad, Si te empeñas en ser idiota, tendrás que ir a casa y beber una botella entera de tónico alazán. 
—Peter: Señorita Espósito — dijo, saludando con cortesía meticulosa. Las manchas oscuras de la falta de sueño por debajo de sus ojos le hacía aún más atractivo, si eso era posible, dando una textura humana a los contornos de su dura cara. Lali logró esbozar una sonrisa ocasional. 
—Lali: Buenos días, capitán Lanzani. 
—Peter: Es tarde. 
—Lali: Oh, ¿No? — miró por encima del hombro en el reloj de la chimenea. Las doce y media. — Buenas tardes, pues. 
Peter alzo luna ceja 
—Peter: ¿Hay algo que puede hacer por usted? 
—Lali: Lo contrario, espero. Me gustaría llevar a Albert conmigo a Ramsay House mientras estás en Londres. Sus ojos se estrecharon. 
—Peter: ¿Por qué? 
—Lali: Quiero ayudarlo a ajustarse a su nueva vida. Albert recibirá el mejor cuidado, y me gustaría trabajar con él, entrenarlo. . . — su voz se desvaneció al ver su expresión amenazante. No se le había ocurrido que podía rechazar su oferta. 
—Peter: Gracias, señorita Espósito. Pero creo que el debe de permanecer aquí con los sirvientes. —Lali: ¿Dudas. . . de que pueda ayudarlo? – pregunto. 
—Peter: El perro es excitable. Tiene necesidad de paz y tranquilidad. Quiero decir sin ánimo de ofender al decir que la atmósfera en Ramsay House es demasiado tumultuosa para él. 
Sus cejas se movieron hacia abajo. 
—Lali: Te pido perdón, capitán, pero estás completamente equivocado. Ese es precisamente el tipo de ambiente que Albert necesita. Míralo desde la perspectiva de un perro. 
—Peter: No necesito tu consejo. 
—Lali: Yo creo que si — dijo impulsivamente. — ¿Cómo puedes estar tan seguro de que estás en lo cierto? Al menos podrías dedicar un momento para escuchar, me atrevo a decir que sé más sobre los perros que tú. 
Peter la ensartó con la mirada dura de un hombre que no estaba acostumbrado a que sus decisiones fueran cuestionadas. 
—Peter: No hay duda de que si. Pero yo sé más acerca de éste. 
—Lali: Sí, pero… 
—Peter: Es hora de que se vaya, señorita Espósito. 

Capítulo VEINTIDOS


Lali se llenó de una oleada de amarga decepción. 
—Lali: ¿Qué crees que tus siervos harán con él en tu ausencia? — le preguntó, y se lanzo antes de que él pudiera contestar. — Lo mantienen encerrado en un cobertizo, o encerrado en una habitación, porque tienen miedo de él, y eso hará que Albert sea aun más peligroso. Está enojado, ansioso y solitario. No sabe que es lo que se espera de él. Necesita atención y cuidados constantes, y yo soy la única persona que tiene el tiempo y la voluntad para ayudarlo. 
—Peter: Ese perro ha sido mi compañero durante dos años — espetó — Lo último que necesita es estar en su casa de locos que esta muy lejos de parecer un hogar. Él no necesita el caos, no el ruido y la confusión. 

Fue interrumpido por una explosión de ladridos salvajes, acompañados de un ensordecedor estrépito metálico. Albert llego corriendo a través de la entrada encontrándose con una doncella que llevaba una bandeja con platos y cubiertos de plata pulida. 

Lali alcanzó a ver saltar tenedores y cucharas por la puerta, justo antes de que su cuerpo fuera arrojado a la sala de recepción. El impacto le robó el aliento. Aturdida, se encontró clavada en la alfombra y cubierta por un pesado cuerpo masculino. Tratando de adaptarse a la situación. 

Peter había saltado sobre ella. 

Tenía los brazos alrededor de su cabeza. . . Instintivamente la había arrojado fuera del alcance del perro. Dejándolos en medio de una confusión de extremidades, prendas de vestir desaliñadas y respiraciones jadeantes. Levantó la cabeza y lanzó una mirada a Peter luego miro cautelosamente alrededor. Por un momento, la ferocidad de su cara asusto a Lali. Se dio cuenta, de que era así cómo había mirado en la batalla. Era lo que sus enemigos habían visto antes de morir. 

Albert corrió hacia ellos, ladrando furiosamente. 
—Lali: No – ordeno en voz baja, extendiendo el brazo hacia él. — Abajo. 
El perro lanzo un gruñido, y bajo su cuerpo hasta el suelo. Su mirada no se movió de su amo. Lali volvió su atención a Peter. Estaba jadeando luchando por recuperar el juicio. 
—Lali: Peter — dijo ella con cuidado, pero él no parecía escuchar. En este momento, no había palabras a su alcance. Deslizó los brazos alrededor de él, uno sobre sus hombros, y el otro por la cintura. Era un hombre corpulento, su poderoso cuerpo temblaba. Un sentimiento de abrazadora ternura se extendió por ella mientras pasaba los dedos por la nuca rígida de su cuello. Albert se quejó en voz baja, mirándolos. 
Más allá de los hombros de Peter, Lali vio a la doncella de pie vacilante en la puerta. Aunque a Lali le importaban un comino las apariencias o el escándalo, le importaban mucho los sentimientos de Peter en un momento vulnerable. Él no quiere que nadie lo viera, cuando no era totalmente dueño de sí mismo. 
—Lali: Déjenos — pidió en voz baja. 
— Sí, señorita — la doncella agradecida huyó, cerrando la puerta tras de si. Lali volvió a concentrarse en Peter, que no parecía haberse dado cuenta del cambio. Cuidadosamente, guio su cabeza hacia abajo tocando su mejilla contra su cabello ámbar. 
Y esperó, haciéndole sentir el ritmo, incluso de su respiración. El olía a limpio, estival, como el sol caliente y el azafrán. Cerró los ojos al sentir su cuerpo largo sobre ella, la firmeza ondulante sobre sus faldas. Pasó un minuto, y otro. Para el resto de su vida se acordaría que había rodado con el a la luz brillante del sol de la ventana. . . su peso delicioso, el calor íntimo de su aliento contra su cuello. Recordaría ese momento para siempre, si fuera posible. 
— Te quiero – pensó — Estoy locamente, desesperadamente enamorada de ti. Levanto la cabeza y la miró con desconcierto. 
—Peter: Lali — su susurro emocionado tenso sus nervios. Sus manos acunaron su cabeza, los dedos largos la tocaron suavemente — ¿Te hice daño? 

El estomago de Lali se contrajo. Negó con la cabeza, incapaz de hablar. Oh, la forma en que la estaba mirando, mirándola en realidad. . . este era el Peter de sus sueños. Era el hombre que le había escrito. Estaba tan conmocionada que quería llorar. 

—Peter: Pensé. . . – interrumpió pensativo, sacó su dedo pulgar y lo paso sobre la superficie caliente de su mejilla. 
—Lali: Ya lo sé — susurró, con los nervios saltando chispas con su toque. 
—Peter: No era mi intención hacer eso 
—Lali: Lo sé. 

Su mirada se dirigió a sus labios entreabiertos, demorándose tanto que ella lo sintió como una caricia. Su corazón trabajado a mil por hora para suministrarle de sangre a sus miembros sin nervios. 

Cada respiración causaba que su cuerpo se alzara contra el suyo, una fricción de carne firme y limpia contra la suya suave por encima de la ropa. 

Lali fue traspasada por los cambios sutiles en su cara, el color se intensifico, el brillo plateado de sus ojos. Era como si la quietud volviera a el, como cuando los rayos del sol rompen en la negrura del bosque. Se preguntó si iba a darle un beso. Y una sola palabra pasó por su cabeza. 

Por favor. 


Continuará...
________________________________________

la besa o no la besa?? mmmmm...
lo sabran mañana!! JAJAJAJA (risa malvada) >:D

lo siento se me acabo el tiempo! :(

MAÑANA les subo más nove, no sé si muchos caps, pero al menos dos... ;)

Nueva NOVEEE!
http://novelaliteril.blogspot.co.il/
http://novelaliteril.blogspot.co.il/

19 comentarios:

  1. como" la besa o no la besa?? " no nos puedes dejar asi kkkk
    me voy a morir de curiosidad hasta mañana !!!

    ResponderEliminar
  2. para mi ya es mañana ,asi k cap

    ResponderEliminar
  3. me quede :O mas porfiii!

    ResponderEliminar
  4. No nos dejes así!! Me encanta más!!

    ResponderEliminar
  5. Aaaaah!! La tiene que besar!!
    Por fas, subi mas capitulos!

    ResponderEliminar
  6. me encanto no nos podes dejar con la duda
    mas noveeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee

    ResponderEliminar
  7. Me encanta esta nove :)
    Espero mañana
    @ligiaelenaCM

    ResponderEliminar
  8. aaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhhhhh!!!!
    interesante capitulo
    para mi hay besoooooooooo
    besos

    ResponderEliminar
  9. quiero mas capitulos
    me encanta esta nove :)

    ResponderEliminar
  10. ay ojala que si... yo tambien digo por favor

    novela solo tu: http://morithalaliter.blogspot.mx/

    ResponderEliminar
  11. lali no eres la unica que dice por favor creeme si me miraras ahora lo entenderias jjajaj QUE LA BESE!!! y que le den a belen hombre que se lo merece por hueca . uffffffff

    Arantxa

    ResponderEliminar
  12. peter ya no puede controlarse :(
    mas nove

    Pau

    ResponderEliminar
  13. comoo lo vas a dejarr ahi? esoo noo se hacee , qiiero saberrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr

    ResponderEliminar
  14. Espero q si la bese me encanto el CAP profundo hahaha quiero más

    ResponderEliminar
  15. que malaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
    dejarlo ahí!!!! mas nove

    ResponderEliminar
  16. para mi no la besa! Creo que los van a interrumpir o el se va a dar cuenta y se va a levantar para evitar ese contacto año ella me encantarOn estos capítulos Gracias besos. Naara

    ResponderEliminar
  17. me encanta esta nove
    sube mas capitulos!

    ResponderEliminar
  18. Ahhhhhhhhhhhh malvada no podes dejar una maraton ahí! Para mi que no le da el beso porque siempre me amagan! Jajajajjaja me encanta la noveeee está muy buena @LuciaVega14

    ResponderEliminar