-Lali: ¿Esperas solucionar esto con una partida de
cartas? ¡Eso es una tontería! -Peter sonrió -¿Así que lo dices en serio de
verdad?
-Peter: Sí -respondió él- Y trabajarías bajo mi supervisión
directa, por supuesto. Tendrías que hacer lo que yo diga.
-Lali: ¿Qué?
-Lali: Dejemos clara una cosa, si gano yo, tú prometes mantener
alejado de mis flores a Boomer. Si pierdo, tendré que trabajar aquí una semana.
-Peter: Solo tres horas al día. Alguien tan ordenada y
organizada como tú seguramente podrá sacar ese tiempo de alguna parte.
Lali se rio.
-Lali: Incluso viniendo de ti, esta es la propuesta más
absurda que he oído en mi vida.
-Peter: Lo que pasa es que tienes miedo de perder.
-Lali: ¿Miedo? ¡Yo no tengo miedo!
-Peter: De acuerdo -dijo él y se encogió de hombros- Lo
que tú digas, La.
-Lali: Muy bien, Lanzani. ¿Qué te parece si lo hacemos
más interesante? Si pierdo yo, Boomer no solo será libre como un pájaro, sino
que vendré a trabajar para ti dos semanas. Pero si gano yo, no solo mantendrás
encerrado a Boomer, sino que tú tendrás que venir a trabajar para mí dos
semanas cuando abra el restaurante.
Ahora fue Peter quien se rio.
-Peter: Estás de broma, ¿no?
-Lali: ¿Tienes miedo de perder?
-Peter: ¿Lo dices en serio? ¿De verdad que vas a aceptar
esto?
-Lali: No solo lo acepto, sino que, gane o pierda,
cumpliré mi palabra. ¿Lo harás tú?
Se dirigieron a la mesa y se sentaron uno delante del
otro. Peter recogió las cartas y empezó a barajarlas. Hacía mucho tiempo que no
jugaba a los juegos infantiles que seguro que prefería ella y esperaba recordar
cómo se hacía.
-Peter: ¿A qué va a ser, La?
-Lali: ¿Qué te parece un poker cerrado?
-Peter: ¿Quieres jugar al poker?
-Lali: ¿Ya qué creías que íbamos a jugar? ¿Al Gin Rummy?
Mi padre me enseñó a contar con una baraja de cartas cuando yo tenía dos años.
Y ahora baraja, Lanzani. Estoy a punto de darte una paliza.
--
Una hora y diez manos más tarde, para alegría de Lali y
desagrado de Peter, el montón de fichas de ella era el doble del de él.
Por supuesto, todavía no había ganado, pero a ese paso le
duraría una mano o, a lo más, dos.
Lo miró por encima de las cartas. Él tenía entornados los
párpados de esos increíbles ojos mientras estudiaba sus cartas.
Ella nunca había tenido la oportunidad de mirar tan
fijamente a un hombre anteriormente, pero en esa situación, podía hacerlo a
placer porque se suponía que era eso lo que tenía que hacer para tratar de
descubrir algún gesto que le indicara las cartas que podía tener él.
Había descubierto que, cuando él se tocaba la barbilla
con un dedo era porque, probablemente, tenía una pareja, por lo menos. Cuando
se rascaba el cuello detrás de la oreja, un trío o más y cuando se frotaba la
barbilla con el pulgar, como estaba haciendo ahora, seguramente iba de farol.
Era por eso por lo que lo estaba observando tan
fijamente. Por el juego, por supuesto.
Nunca antes se había percatado de la cicatriz que tenía
bajo la firme boca, ni del leve bulto que tenía en el puente de la perfecta
nariz.
Era evidente que se trataba de un sorprendente espécimen
masculino. No era su tipo, por supuesto. Después de Bobby, ella se había jurado
que no volvería a fijarse en los hombres encantadores con más músculos que
cerebro. Así que, aunque podía apreciar la masculinidad evidente de Peter Lanzani,
no tenía ninguna intención de ser víctima de ella, como lo eran la mayoría de
las mujeres de la ciudad.
Pero ella tampoco era del tipo de Peter. A él le gustaban
las tontas, las que le reían las gracias y no cesaban de coquetear con él.
Pero no era asunto suyo con quien pasara su tiempo libre Peter.
Su única preocupación ahora era darle una buena paliza a ese tipo arrogante por
el que estaban tan locas las mujeres de Bloomfield.
Miró el diploma del Mejor trasero en vaqueros que él
había colgado de la pared y pensó que, tal vez, le dieran a ella un premio por
haberle ganado al poker.
-Peter: ¿Votaste por mí, La?
-Lali: ¿Qué? -Lali se dio cuenta de que la había pillado
mirando al diploma y dirigió de nuevo la mirada a la mesa. Peter la estaba
mirando divertido.
-Peter: ¿Votaste por mí? -repitió él sonriendo.
-Lali: Claro que no -Mentira. Ese año la competencia
estuvo muy reñida entre Agus, Peter y el sheriff Matt Stoker. Había sido una
elección difícil, pero al final, ella había votado por Peter.
Y se moriría antes de decírselo a él.
-Peter: ¿Por quién votaste entonces?
-Lali: ¿Qué te hace pensar que voté por alguien?
-Peter: ¿Lali Espósito perdiéndose la oportunidad de
expresar su opinión en algo? ¿Por qué no votaste por mí entonces? ¿No crees que
me lo merezca?
Ella se estaba sintiendo cada vez más incómoda por ese
tema de conversación.
-Lali: No podría saber si te lo mereces o no. Ni siquiera
me he fijado.
-Peter: ¿Que no te has fijado? Tú vienes a la taberna
todos los miércoles por la noche para la reunión del Club del Libro. ¿Cómo
puedes no haberte fijado?
-Lali: ¡Peter Lanzani! -exclamó ella dejando las cartas
sobre la mesa- ¡A pesar de tu alta opinión sobre ti mismo, yo no vengo a esas
reuniones para mirarte el trasero!
Él la miró por un largo momento y luego parpadeó.
-Peter: ¿Perdón?
-Lali: He dicho que yo no...
-Peter: Ya te he oído, pero no entiendo... Ah... -miró a
la pared que fue tenía a la espalda y luego continuó -Yo estaba hablando del
premio del restaurante. Tú eres miembro de la Cámara de Comercio, ¿no? Y
votaste por el mejor restaurante de Bloomfield, ¿no?
El premio del restaurante. Lali notó como le ardían las
mejillas. Él estaba hablando de ese premio, no del otro.
-Peter: ¡Qué vergüenza, Lali Espósito! ¿Dónde tienes la
cabeza esta noche? -dijo él riendo.
-Lali: Yo, bueno... Yo...
-Peter: Nunca antes te había visto balbucear y
ruborizarte, La. ¿Estabas pensando en mí...?
-Lali: ¡No! -exclamó ella mirando fijamente sus cartas-
El sol saldrá dentro de unas horas y puedes graznar todo lo que quieras, Lanzani.
Ahora es este juego lo que nos importa. ¿Seguimos con él o no?
-Peter: Lali, tienes que aprender a relajarte y a
divertirte un poco.
-Lali: Me estoy divirtiendo -respondió ella sonriéndole
dulcemente- Tengo el doble de fichas que tú. Te toca apostar, querido.
Peter tomó unas fichas y las puso en la mesa.
-Peter: Cinco dólares -Era una apuesta muy alta, la más
alta que él había hecho desde que empezaron a jugar. Lali pensó que se estaba
echando un farol. Lo había visto frotarse la barbilla con el pulgar hacía solo
unos momentos.
-Lali: Tus cinco y cinco más -respondió. Entonces él se
rascó el cuello tras la oreja izquierda. Vaya. Miró sus cartas. Tres sotas con
un as. Una buena mano, pero no magnífica. Él se volvió a frotar la barbilla con
el pulgar y Lali se mordió el labio inferior.
-Peter: Vamos a divertirnos de verdad -dijo entonces-
Apostémoslo todo.
¿Todo? A ella se le secó la garganta.
-Lali: Estás de broma...
-Peter: No. El ganador se lo lleva todo.
Ella sabía lo bastante como para no apartar la mirada y
mirar sus cartas. La confianza lo es todo en ese juego. No sudar, no balbucear.
Confianza absoluta en uno mismo.
-Lali: ¿Sabes cómo hacer quiche, Lanzani? Es un poco más
complicado que hacer hamburguesas y tirar cerveza, pero seguro que aprendes a hacerlo
-dijo ella y, sin pestañear, puso su montón de fichas en medio de la mesa-. O
tal vez te haga ponerte un esmoquin para servir las mesas. Seguro que habrá
mucha gente que pagará por ver eso.
-Peter: No tanta como la que pagaría por verte a ti con
una bandeja de bebidas en la mano. Yo mismo daría mi salario de un mes para
verlo -Se quedaron mirándose fijamente el uno al otro y él le dijo-Tú me
enseñas lo tuyo y yo te enseñaré lo mío.
Lali dejó sus cartas sobre la mesa sin mirarlas siquiera.
Peter sí las miró. Sin ninguna expresión en el rostro, dejó también las suyas.
Ella contuvo la respiración y bajó la mirada. Cuatro
dieces. Se quedó sin respiración. Empezó a dolerle a cabeza. Boomer, por quien
había empezado todo aquello, roncaba tranquilamente bajo la mesa. Pero ella no
podía culpar al perro por su propia estupidez.
-Peter: Mañana no abrimos hasta las diez -dijo alegremente-
Pero pásate a las ocho para prepararte para el desayuno de los domingos. La
Philadelphia Gazette ha escrito un artículo acerca del premio de la Cámara de
Comercio, así que espero una multitud.
Lali se levantó atontada. Había perdido. Cielo santo. Dos
semanas. Tenía que trabajar para Peter Lanzani dos semanas enteras. Y bajo su
supervisión personal, como él le había dicho. No podía pensar bien. No podía
dejar que Peter viera lo completamente humillada que estaba. Nunca dejaría que
nadie la volviera a ver así.
-Peter: Lali –dijo riendo- No creerás que iba en serio,
¿verdad? Solo me estaba divirtiendo un poco.
Ella levantó la barbilla y entornó los párpados, rogando
que él no viera la forma como le estaban temblando las manos.
-Lali: Eso es lo que nos diferencia a ti y a mí, Peter.
Para ti todo es un juego. No te puedes tomar nada en serio, pero yo pretendo
cumplir mi compromiso, he dicho que estaré aquí a las ocho y lo haré.
-Peter: Como tú quieras, La -dijo él y se encogió de
hombros- Solo recuerda que, si te parece demasiado duro, yo te he ofrecido una
salida.
-Lali: Yo puedo con lo que me eches -dijo ella
desafiante- Lo que queda por ver es si tú puedes conmigo.
Él levantó las cejas y ella se limitó a sonreír y a salir
tranquilamente por la puerta.
Pretendía proporcionarle a Peter Lanzani dos semanas que
no olvidara en toda su vida.
hoy ahahhah manana
ResponderEliminarjajaj me va a gustar muchos esta nove masss
ResponderEliminarcomo la nove es diferente de lo que pensé!
ResponderEliminarajajajaa toda arrogante Lalita y perfio ajajajaja
ResponderEliminarmaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaas , mañana maratooooooooooooooon excelente novela
ResponderEliminarjjaj buenisima esta nove me esta gustando mas que la anterior
ResponderEliminarla otra ni la ley
jaja gracias por los deseos :P
ResponderEliminary bueno antes de irme jaja a leer :) me encanta que lali se dejo por peter y mas para apostarlo todo ja y todo por boomer ahora te tengo una pregunta que tipo de perro es?? jaja no me imagino como lali ara para que peter se arrepienta de la apuesta y mas cuando el la mandara pero bueno se sabe que todas tenemos nuestros trucos :P mas
sube otro de regalo de cumple para mii! porfis! ♥
ResponderEliminarme esta gustando mucho esta noveee :D
quiero mas nove....!!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarPOR FA SUBE MASSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS!!!!!!!!!!!!!!!
Besos q estes bien...!!!! :)
Me resulta muy entretenida y creo q vamos a pasr lindos momentos mientras lali intente hacerle la vida imposible a Peter en su bar,ahora habrpa q ver quien le hace la vida imposible a quien,no?
ResponderEliminarno se como lo ases pero cada una de tus novelas me encantannnn quiero mas soa adictivas maaaaaaaaaaaas
ResponderEliminarPara mi Peter vio las cartas de Lali y por eso estaba tan seguro! Cada vez se hace mas interesante!
ResponderEliminarMas nove! Y por mi puedes hacer la maraton cualquier dia.
Fresy07
Lali va a cumplir su apuesta,pero a peter le va a salir muy cara,aunque no pierde la sonrisa nunca.
ResponderEliminarEl día que puedas yo no tengo problema :) ay s8 no se porque pero quería que gané Peter :p jajajaj buenisimo el cap me encanto !! !!!!!!!
ResponderEliminarPOR FIN LO PUDE LEER!
ResponderEliminarHe estado super ocupada y no habia podido! Genial el capitulo! esta super la nove, ´pues por lo que llevo ;)
besos
@vagomi