CAPÍTULO 64

Peter miró a Legare impertérrito.

—Peter: Antoine Bayonne, ¿verdad?

Lali tan sólo reparaba a medias en la gente que cruzaba el vestíbulo, o en la música, el baile y las risas de los invitados. Ninguno de ellos, sin embargo, era consciente de que los dos bucaneros más buscados del Golfo estaban manteniendo una conversación educada e intrascendente. Ella también miró a Legare mientras los recuerdos se le agolpaban en la mente: la cubierta del barco cubierta de cadáveres... la espalda sanguinolenta de Pablo... la cara hinchada de André...

—Peter: Ve, Lali —dijo con calma, tomando la mano que ella tenía en su brazo—. Todo está bien. Ve con Nicolás

Ella se agarró a él como el náufrago al madero y miró a Legare con los ojos muy abiertos. No habría podido moverse aunque hubiese querido. Peter desistió de intentar convencerla y volvió a centrarse en aquel canalla.

—Peter: Estás corriendo un gran riesgo —dijo—. Podría hacer que te arrestasen en cuestión de minutos.

—Lagare: También vos lo serías. Y nos colgarían juntos.

—Peter: No estaría tan mal si vos fueses el primero.

—Lagare: Antes de tomar cualquier decisión, escucha. Quiero contarle una historia, doctor Vallerand. Da comienzo en el puente de un barco capturado por unos bucaneros. La heroína de la historia es una adorable mujercita. —Sonrió en dirección a Lali—. Ella intentó negociar para salvar su vida y la de su marido. Nos advirtió de que había un Vallerand a bordo. Ese apellido, por supuesto, es muy conocido por sus connotaciones de privilegio y poder. Que su marido fuese médico nos interesó, y al no encontrarlo entre los rehenes decidimos pescar entre los cuerpos que habíamos arrojado al mar. Y de esa manera dimos con el esquivo Vallerand. Estaba muy maltrecho, el pobre, pero seguía vivo. —Se detuvo para observar el efecto que causaban sus palabras.

Lali lo miró como un conejo asustado. Peter, en silencio, barajó varias posibilidades para descuartizar a aquel bastardo. No le creyó ni una sola palabra.

—Peter: Mientes —dijo sin más.

Legare prosiguió como si nada.

—Lagare: Tras decidir que podría serme útil, mandé que lo llevasen a la isla de los Cuervos y lo encerrasen. Siendo como es un purasangre duro de pelar, sobrevivió a sus heridas. Llegados a este punto, he de reconocer que mis múltiples preocupaciones, entre ellas encontrar al asesino de mi hermano, hicieron que me olvidase de mi Vallerand durante unos meses. Hasta que un comentario increíble llegó a mis oídos. Acompañé a uno de mis fieles carceleros al laberinto de túneles que corre por debajo de la fortaleza y, para mi sorpresa, ¡me encontré con la viva imagen de mi barbado enemigo, el capitán Peter! Tras someterle a diversos métodos de persuasión, el prisionero admitió que tenía un hermano gemelo. Me llegaron entonces rumores provenientes de Nueva Orleans respecto a que Pablo Vallerand había vuelto con su familia tras haber escapado de las garras dela muerte. Asípues, dado que el doctor Vallerand seguía gozando de mi hospitalidad, decidí hacerle una visita. Una historia divertida, ¿no le parece?

Peter lo miró. Su cara palideció, en tanto que los ojos centelleaban con fiereza.

Dos lagrimones corrían por las mejillas de Lali.

—Lali: ¿Pablo está... vivo? —preguntó sin poder evitarlo. Legare le sonrió de medio lado.

—Lagare: ¿Por qué está tan angustiada, madame? Parece que le han ido bien las cosas con ambos hermanos.

Peter aferró la cara de Lali con ambas manos obligándola a mirarle.

—Peter: Miente —dijo—. Pablo está muerto.

Legare sonrió.

—Lagare: ¿Estás seguro?

—Peter: ¿Qué quieres? —espetó.

—Lagare: La mayoría de tus hombres se han unido a mí, Peter. No queda nada de tu insolente tripulación. Comportate como un hombre inteligente, sabés que será inútil huir de mí. Puedes esperar a que arreglemos las cosas entre nosotros en el momento que yo elija, o puedes escoger ganar algo. Me gustaría llevar a cabo un intercambio. Vos por tu hermano.

Peter no reparó en que Lali le hincaba las uñas.

—Peter: Incluso aunque aceptase que lo retienes, ¿qué te hace creer que arriesgaría mi vida por la de él?

—Lagare: En la isla aceptaste luchar a muerte por su esposa... —observó, sin necesidad de añadir que habiéndose arriesgado por su esposa, sin duda se arriesgaría por su hermano.

Peter siguió con gesto impasible.

—Peter: Quiero una prueba de lo que decís —exigió—. Después pactaremos un acuerdo.

—Lagare: Si lo que pretendes es ganar tiempo...

—Peter: No es eso. —hizo un gesto hacia el salón de baile y chasqueó la lengua—. Creí que resultaba obvio que tiempo es algo que apenas puedo permitirme. Y vos no quieres malgastarlo si lo que deseas es tenerme a tu merced en lugar de que las autoridades me atrapen.

—Lagare: ¿Deseas una prueba? Envia a uno de tus hombres, a Vico o cualquier otro, a la isla. Le permitiremos ver a tu hermano y le dejaremos marchar sano y salvo. —Miró a Peter y después a Lali—. Ahora tengo que irme. Mi más cordial enhorabuena, madame. Bon soir.

Continuará...
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bueno bueno... las preguntas q se me vienen a la cabeza!!!! USTEDES QUE DICEN?? ESTARÁ PABLO VIVO????....

Espero q les gustaran los caps de hoy! y MUCHAS GRACIAS por las firmitas!!! me encantan sus firmas!!  enserio me encantan!! son muy divertidas y locas!.... pero locas bien... osea locas lindas...

NOOO SE OLVIDEN mañana a las 21:30...creo... SOLAMENTE VOS!! por el canal Trece!

BESOS CHIQUITOS
adiós y nos leemos mañana <3